El otro día los alumnos del certificado de profesionalidad de ORGANIZACIÓN Y PROYECTOS DE INSTALACIONES SOLARES FOTOVOLTÁICAS (ENAE0508) salieron con su profesor, Carlos Romón, a realizar una práctica sobre los conceptos teóricos expuestos en clase. Nos cuentan su experiencia.

Con la ayuda de un medidor de irradiación solar, una brújula, un polímetro y un termómetro hemos estado verificando en la práctica la influencia de la orientación (azimut), inclinación y temperatura en la generación de energía eléctrica de origen fotovoltaico. 

Para ello hemos montado y conectado en paralelo los paneles que tenemos en clase. Hemos ido variando después su inclinación y orientación y midiendo entonces la irradiación que reciben, la temperatura ambiente y la de las células y leyendo con el polímetro la intensidad que en esas circunstancias ambientales están generando los colectores. 

De esta manera estamos comprobando cómo es muy importante diseñar bien las estructuras sobre las que pondremos los paneles para que el aprovechamiento de su potencial sea lo mayor posible. 

Esta práctica nos ha servido para verificar lo fundamental que es el tema de replanteo que estamos trabajando en el aula de teoría en el módulo actual.

A partir de estos datos, tomamos como ejemplo una pequeña caseta de campo que un compañero tiene en su pueblo, en Cáceres.

Nos hace una estimación de las demandas eléctricas que suele tener y a partir de ahí vamos dimensionando y calculando el número de paneles y la capacidad de las baterías que sería necesaria para cubrirlas en función de la orientación, inclinación y datos de irradiación de su localización.

Los ejercicios de dimensionado de instalaciones autónomas, no conectadas a red, lo vamos ampliando y concretando cada uno en función de circunstancias ambientales y geográficas particulares. De esta manera, dimensionamos para instalaciones que cada alumno plantea de manera particular según sus intereses. 

Así, los ejercicios son individuales, concretados según intereses de cada alumno y podemos luego compartir los resultados para valorar cómo influyen las características de ubicación estudiadas en el módulo. 

Este tipo de prácticas contribuye a hacernos entender porqué insistimos tanto en clase en ajustar correctamente determinados parámetros de diseño. Pequeñas variaciones en cuanto a inclinación, desviación con respecto a la orientación óptima, variaciones de potencia según la temperatura, etc son factores que determinan el número de paneles necesarios para cubrir las demandas planteadas en cada caso.